“Los museos son espacios de memoria y no de espectáculo”: Magdalena Zavala Bonachea

Cuando sucede un desastre natural, una de las últimas necesidades de rescate es el patrimonio museológico, asegura Magdalena Zavala Bonachea, coordinadora nacional de Artes Visuales del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), es por eso que por séptimo año consecutivo, se abrió la convocatoria para que los países iberoamericanos soliciten la utilización de los 30 mil dólares del fondo de emergencia del Programa de Apoyo al Patrimonio Museológico en Situación de Riesgo.

Dicho fondo es parte de las líneas de acción del Programa Ibermuseos, una iniciativa que nació hace 10 años y que sirve para la cooperación e integración cultural de los 22 países iberoamericanos, incluidos España, Portugal y Andorra.

“Dentro del Primer Encuentro Iberoamericano (celebrado en 2007), surgió la idea de reflexionar sobre qué es lo primero que deberíamos de atender en casos de desastres naturales, cuáles eran las circunstancias y una de las cosas que se dijo es que el área Iberoamericana tendría que trabajar en la protección de su patrimonio cultural”, comenta Magdalena Zavala Bonachea, presidenta del Consejo Intergubernamental del Programa Ibermuseos.

En ese encuentro, añade, se valoró por todos los miembros del comité, que era muy difícil acceder a fondos de rescate para patrimonio cultural en caso de desastre porque “obviamente las prioridades son las necesidad de las personas, la subsistencia, evitar la emergencia sanitaria, reestructurar lo destruido y hasta el final se dejaba el patrimonio como una necesidad importante pero para la que no había recursos”.

A partir de esa necesidad se creó el fondo de emergencia que lo conforman 12 países, no obstante, está dirigido para toda la región Iberoamericana. “Desde que se creó el programa, lo hemos usado todos los años, se ha dado a Chile por daños a causa de sismo, a España por un temblor en Andalucía, el año pasado se le otorgó a Ecuador por un temblor y a Brasil por una inundación”.

—¿Qué riesgos considera este fondo?, se le pregunta a la funcionaria.

—“Los riesgos naturales clásicos como incendio, sismos, inundaciones, contaminación y derrumbe del inmueble. Es un fondo que va destinado al rescate de los objetos museológicos, no a reconstruir una ciudad, sino a rescatar la cerámica y pintura misma, y esos criterios los evalúan un grupo de expertos, porque la idea es que el objeto pueda ser recuperable”.

En el caso de México, los expertos que participan en la toma de decisiones para destinar los 30 mil dólares con los que actualmente cuenta el fondo, son los miembros del Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble (Cencropam).

“No podemos entregar los recursos a todos los países, únicamente a los casos que cada estado pueda considerar una emergencia. La convocatoria para el fondo 2017 la abrimos a partir del 15 de mayo y no se cierra hasta que se termina el fondo, porque es un recurso fijo y si en un año no se gasta, éste se incrementa para el siguiente año”, detalla Zavala Bonachea.

El recurso del fondo se utiliza para cubrir gastos de especialistas, consultorías técnicas, proyectos de reorganización y conservación o restauración de acervos afectados.

—¿México cuenta con un mapa de patrimonio museológico en riesgo?

—Somos respetuosos de las zonas de riesgo que cada país define. Para México, las zonas de riesgo son las zonas sísmicas, las zonas de inundación como Veracruz, Tabasco, Chiapas y Oaxaca; así como la zona del norte que tiene proclividad al cambio de temperatura.

“Lo que como país presentamos como zonas de riesgo, es en general, para sismo e inundación porque son los daños más emergentes. El mapa que tenemos es el mismo que emite protección civil”, agrega.

DIEZ AÑOS. Magdalena Zavala Bonachea, coordinadora nacional del INBA, enfatiza en que los programas de ibermuseos, que este año cumplen una década, son una iniciativa de la Secretaria General de Estados Iberoamericanos (Segib), con carácter intergubernamental, con varias líneas de acción y con dos tipos de fondos: inversión y fomento.

“El fondo de fomento es para propiciar la mejora de la institución de manera permanente, ya que el área iberoamericana tiene alrededor de 9 mil museos, es decir, estamos hablando de que se calcula de que hay 2 millones de bienes culturales alojados en los espacios museológicos, sin contemplar zonas arqueológicas”, precisa.

La especialista comenta que la visión iberoamericana es que los museos son espacios de memoria y no de espectáculo. “No concebimos a los museos como espacios de espectáculos, sino como espacios en donde lo que albergas  o presentas tiene que ver con un juicio de memoria. También deben ser espacios incluyentes, tolerantes que generen una dinámica cultural que logre la cohesión social, por ello, los museos que tienen fines de lucro no están dentro de esa categoría”.

Fuente: La Crónica de Hoy (México)